Lope Marín Brito (Lopito), el Dr. Emiro Marcano Maza y la pipa (El Maco Hablando en Décimas)

Autores: Lope Marín Brito, Emiro Marcano Maza y Evaristo Marcano Marín

El blog Museo Virtual El Maco, ha  venido animando y publicando, la columna de EL MACO HABLANDO EN DECIMAS. Una iniciativa que sugirió del paisano Nelson Velásquez. Con su empeño, artículos y también animación, se ha ganado y muy bien, la condición de ser el padrino y coeditor del Blog. El Blog Museo Virtual El Maco necesita de padrinos, madrinas y colaboradores.

En una oportunidad, Nelsón me habló de sistematizar un trabajo que recogiera la tradición en El Maco de hablar en décimas, que es bueno y oportuno decirlo; el hablar en décimas, es una tradición muy margariteña.

Nos propusimos este objetivo y en su desarrollo ya estamos viendo que efectivamente El Maco hablaba en décimas y los mejor de esto, es que estamos rescatando muy bien esta iniciativa. En el grupo Whatssap del Museo Virtual El Maco se habla, muchas veces en décimas.

Sabemos que la espinela (décima) es una poesía tradicional con una estrofa de diez versos octosílabos (preferiblemente), creada por un músico y poeta murciano de nombre Vicente Espinel.

A través de la décima o espinela, los miembros de una comunidad suelen tratar sus problemas y satisfacciones. En la vida de un pueblo, la décima ha facilitado cuestionar, alabar, celebrar e ironizar los acontecimientos. No es en el ámbito tradicional o vecinal, donde la décima o espinela se desenvuelve. En espacio muy luminosos, la espinela también ha logrado un importante desarrollo.

En una oportunidad que conversaba con Beto Valderrama, que es un maestro con la mandolina, la bandola y es un buen decimista, me decía que una de los lugares en el mundo donde la espinela ha alcanzado un extraordinario desarrollo, es en Margarita. La espinela o la décima en Margarita ha logrado expresarse a través de seis ritmos musicales.

Rescatamos en esta caso, la décima como una manera de sacar a la superficialidad, todo el ingenio popular y la chispa que tiene el maquero. Hay espinelas que en este particular son una joya.

El Blog a través de la columna EL MACO HABLANDO EN DÉCIMAS viene recogiendo situaciones en las cuales esta forma de decir la cosas (en poesía tradicional) muestra esta cara. 
Publicamos un intercambio de décimas entre el ciego Lista, que fue un gran decimista de Tacarigua y Nuestro Balbino Brito Quijada. En una, el ciego Lista cuenta, que fue a visitar a Nuestro Balbino y no pudo encontrarlo, pero como una muestra de afecto, cariño y lamento por no poder conversar con su gran amigo, el ciego lista le deja una décima de este tenor:

 
Aquí en esta habitación

Me ha ido muy mal, Balbino

Porque vino un palomino

Y me cagó el pantalón

Con un polvo de almidón

Cubrió la mancha amarilla

Que bonita esta semilla

Que Dios produce y daré

Pero ya Yo la borré

Con tela, café y tortilla

En una oportunidad muy desafortunada, nuestro gran decimista, Balbino, tiene la necesidad de compartir con el ciego Lista (Juan Lista), la tragedia de la ceguera. En uno de sus trabajos, Víctor Marcano(+) recoge esta situación y coloca la décima que Balbino le envía a Juan Lista. Víctor Marcano, lo refiere así:

“Una mañana, el señor Balbino no vio la luz solar y diez meses después , el poeta le escribió una décima a su amigo Juan Lista quien cantaba en velorio aún estando ciego, diciéndole

Ayer, Juan Lista, cumplí

diez meses de sufrimiento,

de inquietudes y tormentos

que están pasando por mí

Tú no dudas que es así

porque tu conciencia es pura

y das creencias segura

de un padecer tan terrible,

en un caso tan horrible

clamo a Dios en las alturas

II

El Dr. Emiro Marcano fue fumador de pipa. En un momento sintió que este hábito le estaba perjudicando y decidió abandonarlo. Lopito (Lope Marín Brito) que era su compadre y con cual compartió momentos, cuando el Dr. Emiro cursó estudios de secundaria en Cumaná, fue fumador de pipa.

El Dr. Emiro, ya habituado a no usar la pipa, pensó en regalarle su buena a pipa al compadre Lopito. Así se lo hizo saber en una de las visitas que el Sr. Lopito hacia al pueblo. Pasó un tiempo y Lopito en una nueva visita al pueblo, estuvo esperando la pipa que no llegó. Sintió la necesidad de la pipa, le dolió la promesa incumplida y preparó una décimas que se las hizo llegar al Dr. Emiro.

DR. EMIRO MARCANO M. Por Lope Marín B.
I Un compadre me ofreció una pipa que tenía quizás se arrepentiría porque al fin no me la dio. Por lástima de que yo no se la estaba pidiendo ni mucho menos diciendo démela mi compaíto porque todavía Lopito de nada está careciendo.	III Si usted tiene en su poder la pipa que me ofreció désela a otro que yo tengo una en mi poder donde me doy el placer siempre echar mi humarada pero no culpes en nada a su querida señora pues sé que no es promotora ni la señora Librada.
II yo salí de Cumaná y en casa dejé la mía tal vez porque me creía tener otra por acá. Que equivocado está el que con lo ajeno cuenta porque siempre se presenta genuinos embarcadores que a expensas de sus motores engañan sin darse cuenta.	IV En fin compadre me voy gracias le doy por su engaño eso no tiene tamaño pero siempre de Ud. soy. En donde quiera que estoy puedes conmigo contar que yo no sabré engañar como Ud a mi me engañó, adiós compaíto adiós me ausento de mi lugar. 10 -- 10 --1972

El Dr Emiro apenado por su descuido u olvido, prepara en décimas su respuesta, que se las hace llegar a su compadre. Estas décimas iniciales  se extraviaron. Se hizo un esfuerzo por ubicarlas y hasta ahora no se han podido recuperar y el Dr. Emiro trato de recordarlas. 

RESPUESTA PAR UN RECLAMO Dr. Emiro Marcano Maza
I Con mi lamento repito haber perdido espinelas con que apagué la candela en mi compadre Lopito. A su descendencia invito que revisen sus papeles y que Él desde otros niveles ilumine su memoria para que así nuestra historia a la verdad seamos fieles.	III Fue pipa con picadura muy fina y olorosa como el perfume de rosa que al fumarla era frescura. Hoy en día nadie procura cambiar pipa al cigarrillo de muchas marcas, sencillo con el humo hacer volutas que hacen soñar varias rutas con canciones y estribillo.
II Reconozco de mi parte tardanza para entregar la pipa que regalar hice a dilecto baluarte. Pero la ciencia y el arte al ejercer medicina aunque es muy dura y es fina acciones y tiempo exige hasta que el arte corrige a la ciencia si es mezquina	IV Tengo la satisfacción de haber hecho buen regalo no regalar, nunca malo sino de buen corazón. Hay cosas que a la razón le parezca muy bonito pero en mi alma está escrito este sentimiento austero: amistoso y muy sincero para el compadre LOPITO. E.M.M. 19 ---XI---20

(*) Tomado del documento de Víctor Marcano: Te Regalo una Flor