Por qué El Maco hablaba en Décimas

                                          Por: Nelson Velásquez



La idea de incluir en el Blog  “Museo Virtual El Maco” la Columna Mi Maco Hablando en Décimas, recibida con beneplácito por su Administrador, el paisano  Evaristo (Evaristico) Marcano Marín; fue con el propósito de sacar del baúl de los recuerdos muchas Décimas sobre eventos que ocurrieron en el pasado y que nuestros ancestros compusieron en Décimas con el fin de hacerlas públicas en el pueblo. Muchos son los temas que se han publicado al respecto, en este Blog, que ha despertado mucha motivación para continuar con sus publicaciones. Recordemos algunos de  los casos ya publicados:

Ø La carta (en Décimas) de Nicomedes Carrión, a su madre, queriendo saber de Ella.

Ø Cuando Gerardo salió a buscar leña y lo cagó un mapurite.

Ø Cuando Agustina, ante un torrencial aguacero, confundió una plancha de zinc con un platillo volador

Ø Diálogos (en Décimas) entre Balbino Brito Quijada y el Ciego Lista, de Tacarigua.

Ø Lorenzo Valderrama, atacado en el cerro  por abejas africanas.

Ø El ofrecimiento incumplido a Lopito Marín, de una Pipa, por parte del Dr. Emiro

Ø Homenaje a Arsenio Ramón Rivero

Ø Balbino Brito Quijada reclama a Isaías Maza, retardo en la entrega de una faja

Pero, sobre el caso, caben las preguntas: ¿Qué motivó a los viejos de nuestro pueblo a hablar en Décimas sobre eventos ocurridos?, ¿Por qué se hizo tan popular esa práctica?, ¿De dónde viene su origen? . Para explicar bien estas interrogantes debemos remontarnos a nuestra época Colonial, donde los Españoles, en su rol de conquistadores, influenciaron notablemente en nuestras costumbres y en la de otros países conquistados.

El término Galerón, donde su canto es la Décima, data desde el año 1625, cuando el Rey Español Felipe IV ordenó la celebración de una fiesta en todos sus reinos, por la llegada a Nueva Cádiz  de la armada de los Galeones, que eran unos barcos muy grandes utilizados en el comercio y la guerra. Los Galeones llegaron a América durante el período de la conquista, trayendo los cantos de Punto Libre. Los cantores mayores que utilizaban para sus versos la “Décima de Espinela” recibieron el nombre de  Galeones o Galerones. En Venezuela, el Galerón es la ofrenda musical a la Cruz de Mayo, considerada la más bella tradición del oriente venezolano.

La Décima, que inicialmente  tenía su propia estructura, sufrió un cambio a rima consonante y una métrica de diez versos octosílabos, que llamó Redondillas de diez Versos;  atribuible a Vicente Espinel, un novelista español que vivió en los años 1550 – 1624. Este tipo de Décimas se extendió por toda América adquiriendo diferentes nombres en los países donde se cantan. Entre los géneros musicales que usan Espinela en América se encuentran: en Cuba el “Punto Guajiro”, en Puerto Rico la “Trova” o “El Seis”, en Colombia “Torbellino”, en México la Valona,  en Panamá “El Torrente” y en nuestro país Venezuela el “Galerón”, la Folía Oriental, la “Décima Zuliana”, la “Gaita Oriental”, el “Punto de Velorio” y la “Décima de Cantaduría”.

El escritor y poeta, José Joaquín Salazar Franco, un Margariteño que vivió en los años 1926 – 2000 destaca la importancia de la Décima de Espinela para los orientales. Comenta nuestro paisano escritor, que fue tanta la confianza que en nuestra tierra oriental se le dio a la Décima Espinela que la gente aprendió a conversar y comunicarse en Décimas, a expresar sus sentimientos en Décimas. Si había una tragedia, los poetas populares elaboraban Décimas y la cantaban o recitaban en todas partes para que se las aprendieran y la fueran repitiendo por todas partes. Si en vez de una tragedia era una alegría, hacían lo mismo. Si había que criticar una cosa igual lo hacían en Décimas.

Para los bautizos y los cumpleaños, también componían Décimas. Las cartas, los cobros de cuentas morosas, las sequías, los huracanes y los naufragios, quedaron registrados en Décimas tanto en los periódicos como en la memoria de la gente; inclusive, las cartas amorosas y las notas de condolencias, en muchas ocasiones, se llevaban a cabo en Décimas Espinelas. O sea, que la gente se había acostumbrado a pensar que la Décima servía para todo, pero siempre con el RESPETO y la CONSIDERACIÓN que merecía.

La Décima Espinela está compuesta por diez versos octosílabos, que deben obedecer a una métrica y a una rima consonante; su estructura es ABBAACCDDC, o sea, rimando la primera con la cuarta y quinta, la segunda con la tercera, la sexta con la séptima y décima y la octava con la novena; y es usada para el canto de Galerón, como acto devocional para los Velorios a la Cruz de Mayo, puesto en práctica en el Oriente del país, en especial en los estados Sucre y Monagas; donde se presentan los Galeronistas más importantes del país. Los instrumentos usados  en el canto de Galerón son: El Arpa, El Cuatro y Las Maracas pero, en los tiempos actuales, vemos la Bandola, Bandolina, Cuatro, Guitarra y Maracas.

Sobre como estructurar una Décima, traigo a colación dos (2) composiciones donde, mediante décimas, se da su definición y como componerla. Una, corresponde al escritor  Andrés Díaz Marrero, quién nació en San Juan, de Puerto Rico en 1940;  la otra,  corresponde a Nelson José Velásquez (este servidor), nacido en El Maco, Isla de Margarita, en 1945.

                Andrés Díaz Marrero

           Nelson José Velásquez

 

I

 

Cuando quieras escribir

Una décima bonita

Que te salga redondita

Diez versos tienes que unir

Para que logres seguir

Rímalos en consonante

Su octosílabo vibrante

Cumbre del arte menor

Será un gorjeo de amor

Para que el alma lo cante

 

I

 

Conformada por diez versos
Y expresada en canto
Es la Décima, por tanto
Pieza de nuestro Universo 
En su creación va inmerso
La habilidad del poeta
Que cualquier tema interpreta
Con sobrada maestría
Décima, es poesía 
De una manera completa

 

 

 

II

Rima el primero y el cuarto

Consonante con el quinto

Tan fácil como lo pinto

Todas las dudas aparto

Diez perlas en mi hilo ensarto

Para expresar lo que quiero

El segundo y el tercero

Ambos riman en pareado

Y obtenemos sin enfado

Lo que pareció tan fiero

 

III

Pareo octavo con noveno

El resto rima entre si

La espinela vibra así

En diez versos que encadeno

Con ellos el alma lleno

Y los canto a viva voz

Voy de la belleza en pos

Con la décima trovando

Mi corazón, desbordando

Con esta gracia de Dios

 


II
Detallo a continuación
Con verdadera prestancia
Cómo es la consonancia 
Para su composición
Pues ya, en una ocasión
Para que Ud. se imagine
Vicente Espinel, define
Su métrica y su rima
Comenzando con la PRIMA
Que con la CUARTA combine


III
La SEGUNDA en su lugar
Rimará con la TERCERA
La QUINTA, como se espera
Con la CUARTA ha de cuadrar
Luego la SEXTA va a estar
Con SEPTIMA en armonía
La OCTAVA en la poesía
Ha de rimar con NOVENA
Y DÉCIMA enhorabuena
Con SÉPTIMA rimaría

 

 

 

Lo aquí descrito, justifica el Por qué Nuestros ancestros pusieron en práctica la Décima Espinela para dar a conocer cualesquiera eventos ocurridos. Práctica, a la que las nuevas generaciones han dado continuidad. Hoy vemos como ejemplo, a un grupo de maqueros  que conforman los  Grupos WhatsApp: “Museo Virtual El Maco” y “El Maco y su Gente”,  hablar en décimas para relatar cualquier episodio ocurrido a sus integrantes.

 

NOTA Administrador del Blog: Un detalle que deseo destacar, por lo que valoro del tema, es el lugar que ocuparon Antonio (Perico) Velásquez y Arsenio (Cheno) Rivero en “pleitos” que se planteaban con décimas. Hay muchas décimas, que el tiempo ha ido borrando. Conocimos unas, que guardaban muy bien, el doble sentido y la picardía.

Oye Arsenio marutón

tú me llamaste perico

yo arrimándote ….

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